sábado, 16 de agosto de 2014

Adios Lofoten, seguimos por Noruega. 16 de agosto de 2014




Apareció, apareció ese día en el que solo ves el momento de llegar a la habitación.
La primera parte fueron casi 200 km por Las Lofoten, y ahí la cosa no fue mal. Las Lofoten aun lloviendo son especiales, además de rato en rato se dibujaban de repente arco iris enormes. A veces incluso se apoyaban en una isla para descansar en otra. Pero, ¿porque había arco iris? porque llovía. Sergio estaba más rabioso, cambió un día de la ruta sobre la marcha para estar un día más en Las Lofoten, pero aun así las lluvias no acaban de abandonarnos. No hicimos todas las fotos que nos hubiera gustado, porque no salían como nosotros lo estábamos viendo. Y es que la luz no era la más propicia. Aun así aprovechamos esos arco iris y rayos de sol para mostrar un detalle de lo que si se puede, no hay que dejar de ver, las Lofoten.
La carretera que llega a Moskenes, donde cogíamos el ferry estaba cortada hasta la una, así que se merendaron nuestro margen para acercarnos a Å, último pueblo de las Lofoten.
Mi primer ferry serio con la moto, estaba nerviosa, porque claro un ferry igual a rampas, rampas y cuestas suelo quizas resbaladizo y fila, uno detrás de otro el que se caiga queda fatal, pero vamos que no pasó nada, nervios sí pero todo fenomenal. Despues de tres horas y cuarto de ferry, habíamos comido, dormido y aletargado.
Ahora quedaban cinco horas y un poco más hasta llegar a destino. Pues con lluvia intermitente y seis grados, pues como que se te olvidan las Lofoten, " la bola" y todo. También tengo que decir que soy muy friolera y claro, se me pone mala leche, etc.
Hoy es el día que más agotada he acabado, el corte del ferry, el frio, la lluvia.
Ahora pienso como aguantaba Sergio este frio en la expedición Aurora Borealis, abriéndose el casco porque si no las gafas se empañaban.
Cuando he dejado el ferry y era consciente que jamás vuelva a las Lofoten , he sentido un tanto de angustia, son tan bonitas...quizás no vuelva a estar allí, quizás nunca las vea con un sol radiante, pero aun sin mostrarme toda su belleza, estoy segura de que tardaré mucho en ver un sitio tan bonito.
Ves como embrujan? empecé mi crónica enfadada por las ´ultimas cinco horas de moto cuando salimos del ferry, y acordándome de las tres primeras horas del dia se me pasó. Y es que al fin y al cabo hoy había arco iris, y seguimos en noruega y de reojo porque iba todo y más rápido de lo que decían las señales y Sergio vi que había renos, fiordos y puentes pero no eran las Lofoten donde además hoy ví vacas de pelo largo , chulísimas y es que lo que no se ve allí...


1 comentario:

  1. Hasta los más valientes lloran! Ánimo guapetona espero q está etapa sea más sequita y que siga el rosaaaaa

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