jueves, 21 de agosto de 2014

Oslo- Gottemborg.21 de agosto de 2014.



Bueno no llueve, aunque las nubes siguen ahí, desayunamos en el hotel y salimos. Hoy la ruta no es excesivamente larga, decidimos ayer dormir en Gottemborg en lugar de coger el ferry de la tarde alli y pasar a Frederikshaven( o algo así).
Los kilómetros me van pesando y es que como ha comentado hoy un amigo, "para una novata es mucho tute". Y yo soy novata, y además mujer, así que subo y bajo como una noria y aunque sea muy de ¡venga adelante!, necesito bajar el ritmo.
Cada día una cama, un hotel, hytter o lo que sea, maletas, ciudades, países diferentes. A veces me levanto para ir al baño y tengo que pensar hacia donde voy porque no se donde me encuentro. Sí, tampoco me suelo orientar muy bien y que? cosa de la mayoría de mujeres.
Pero hoy mi idea era cambiar de actitud, porque ayer terminé fatal y el pobre Sergio acaba pgándola como es normal, además de mi pareja es ese compañero de viaje y amigo.
Pero yo priorizo el termino de "pareja" y el cansancio me pone "tonta" así que hoy reclamando "mimos" todo el día y bueno milagros no, porque Sergio es como es, pero me ayuda el ver que intenta hacerme sentir mejor . A veces, él no lo sabe, pero hasta cuando calla o zanja un tema se lo que quiere decir y me gusta, o dice una frase en el momento oportuno y yo que soy muy peliculera la adorno como quiero y oye genial.
Bueno hoy no hablo mucho de la ruta pero es que ha sido eso, de Oslo( 70 km antes) a Gottemborg, o de puente a túnel y de túnel a puente y tiro porque se me lleva el aire. Sí sí, que los últimos kilómetros hemos tenido bastante aire, el mismo que supongo ha permitido que nos mojáramos muy poco en lugar de mucho.
Fotos? pues una en Oslo, ciudad que me ha parecido caótica con mil railes de tranvía y con edificios sin nada a resaltar y eso que estábamos en el centro. El edificio de la ópera, blanco de grandes rampas por las que cientos de encorbatados y señoras embutidas en faldas de tubo, tacones y vestidos de ejecutivas andaban raro para no caerse por las famosas rampas, que por otra parte, abajo hay un cartel que dice, resbala, bajo su responsabilidad. Así que ir a la ópera o a un congreso aquí tiene ese plus de peligrosidad.
Y desde Oslo, autopista, carretera y poco más, hemos hecho compra en un súper y hemos comido en la plazita de otro súper, decorada con libros esculpidos en piedra. Ya habíamos entrado en Suecia.
Por lo tanto, hoy hemos dicho adios a Noruega, quien se ha despedido con lluvia, pero de la que me llevo muy buenos recuerdos.
Y a eso de las siete ya estábamos en el hotel de hoy , un cuartel de la marina del siglo XVII. Ahora reconvertido en hotel, las habitaciones se distribuyen en largos pasillos de pabellones y cada habitación tiene tres alturas, abajo el baño , una intermedia con una mini cocina y mesa y una más arriba con el dormitorio, curioso, y da a a un parque delante del muelle.
Gottenborg...pues no me ha llamado la atención especialmente, salvo la gente que iba muy arreglada, ellos de corbata y pañuelos en la americana y ellas con tacones y muy puestas...vamos como los de la ópera que salían del congreso de esta mañana, pero estos últimos con ganas de marcha. Hoy yo he buscado sopa, pero no ha habido suerte y es que el sueco no se entiende nada, así que sin sopa. Aunque sí  hemos cenado sentados en restaurante como Dios manda, ya vale de bocadillos y de llegar demasiado tarde. De todas formas me he comprado sopas de esas que se preparan con agua por si a caso ja ja.
Y mañana empezamos con el ferry y nos acercaremos lo máximo a Hamburgo o eso creemos que todavía no lo hemos decidido.

4 comentarios:

  1. Hoy te noto mejor que ayer!!!! Y mañana ya al 100%!!!!

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias por tus comentarios Isabel. A tope!!!

    ResponderEliminar
  3. Desde luego el arquitecto de ese edificio de la ópera no era muy forofo de las mujeres....y ya sabes hoy más y mejor !

    ResponderEliminar
  4. Tiradas mas cortas y reclama mas mimos. En dos días como nueva.Un abrazo a los dos. : )

    ResponderEliminar